Tezontepec de Aldama.- Propietarios de parcelas en el cerro del Xicuco deslindan a Higinio Pérez Porras y a su hermano Alberto de presunta venta de tierras, sostienen que los trazos de caminos solo son para llevar agua a los árboles que han sembrado para reforestar el sitio.
Ha petición explicita de Higinio Pérez Porras quien declaró ser completamente ajeno a las acusaciones en su contra por supuesta destrucción del cerro del Xicuco, el líder nacional de la (CONAPIR) pidió a su hermano Alberto que junto con labriegos propietarios de parcelas ubicadas en dicho cerro se presentaran en sus oficinas y respondieran los cuestionamiento de este corresponsal.
Sobre el caso, tanto Higinio como su hermano se deslindaron de los señalamiento y presentaron a los señores Rogelio Cornejo Hernández, Eugenia Blancas Hernández quienes acompañados con otros ejidatarios subrayaron que Higinio es completamente ajeno a tema del desmonte en el cerro del Xicuco y mucho menos con la supuesta venta de tierras.
Revelaron que desde 1985 y 1986 por indicaciones de la comisaría ejidal –de aquel entonces- la tierras alrededor del enigmático cerro fueron repartidas entre ejidatarios de varias comunidades de Tezontepec de Aldama y que con el anuncio de la construcción de la nueva refinería algunas tierras cambiarían de uso por lo que decidieron posicionarse de ellas.
Hay en el lugar cerca de 70 casitas ya instaladas, reconocieron los ejidatarios quienes aseguraron no estar invadiendo algo que por ley les corresponde, además de contradecir lo que en varios medios se publico sobre el supuesto desmonte que se estaba haciendo, “Al contrario hemos esta reforestando el lugar, pero para llegar hasta donde sembramos los nuevos arbolitos límpianos los caminos” dijeron.
Por su parte Alberto Pérez Porras contó que hace como un año –cuando estaba en su apogeo el tema de la compra de tierras para la nueva refinería- la Secretaria de Agricultura –Sagarpa- había solicitado al ejido de Tezontepec 30 hectáreas para reforestar, sin embargo no se les otorgó nada ya que todo estaba repartido entre los ejidatarios.
A partir de ahí, los campesinos propietarios de parcelas en el cerro pensaron que las iban a quitar por lo que algunos se apresuraron a limpiar sus predios y a sembrar la tierra, dijeron que de acuerdo con informes del INEGI la zona del Xicuco esta considerada como un espacio de población altamente marginado por lo que son factibles de recibir apoyos federales a través de los programas de gobierno.
Por su parte Higinio Pérez Porras, recamó que la implicación que hicieron de su persona responde más a cuestiones políticas y que si no se había involucrado en el caso ahora si lo hará y pedirá a la asamblea ejidal que a través de un acta que diga que uso le van a dar al cerro del Xicuco, y pedirá que estén presentes en ella, representantes de la Procuraduría Agraria.
Ha petición explicita de Higinio Pérez Porras quien declaró ser completamente ajeno a las acusaciones en su contra por supuesta destrucción del cerro del Xicuco, el líder nacional de la (CONAPIR) pidió a su hermano Alberto que junto con labriegos propietarios de parcelas ubicadas en dicho cerro se presentaran en sus oficinas y respondieran los cuestionamiento de este corresponsal.
Sobre el caso, tanto Higinio como su hermano se deslindaron de los señalamiento y presentaron a los señores Rogelio Cornejo Hernández, Eugenia Blancas Hernández quienes acompañados con otros ejidatarios subrayaron que Higinio es completamente ajeno a tema del desmonte en el cerro del Xicuco y mucho menos con la supuesta venta de tierras.
Revelaron que desde 1985 y 1986 por indicaciones de la comisaría ejidal –de aquel entonces- la tierras alrededor del enigmático cerro fueron repartidas entre ejidatarios de varias comunidades de Tezontepec de Aldama y que con el anuncio de la construcción de la nueva refinería algunas tierras cambiarían de uso por lo que decidieron posicionarse de ellas.
Hay en el lugar cerca de 70 casitas ya instaladas, reconocieron los ejidatarios quienes aseguraron no estar invadiendo algo que por ley les corresponde, además de contradecir lo que en varios medios se publico sobre el supuesto desmonte que se estaba haciendo, “Al contrario hemos esta reforestando el lugar, pero para llegar hasta donde sembramos los nuevos arbolitos límpianos los caminos” dijeron.
Por su parte Alberto Pérez Porras contó que hace como un año –cuando estaba en su apogeo el tema de la compra de tierras para la nueva refinería- la Secretaria de Agricultura –Sagarpa- había solicitado al ejido de Tezontepec 30 hectáreas para reforestar, sin embargo no se les otorgó nada ya que todo estaba repartido entre los ejidatarios.
A partir de ahí, los campesinos propietarios de parcelas en el cerro pensaron que las iban a quitar por lo que algunos se apresuraron a limpiar sus predios y a sembrar la tierra, dijeron que de acuerdo con informes del INEGI la zona del Xicuco esta considerada como un espacio de población altamente marginado por lo que son factibles de recibir apoyos federales a través de los programas de gobierno.
Por su parte Higinio Pérez Porras, recamó que la implicación que hicieron de su persona responde más a cuestiones políticas y que si no se había involucrado en el caso ahora si lo hará y pedirá a la asamblea ejidal que a través de un acta que diga que uso le van a dar al cerro del Xicuco, y pedirá que estén presentes en ella, representantes de la Procuraduría Agraria.
Finalmente, revelaron que por acción natural del crecimiento urbano el Xicuco esta destinado a ser poblado tarde o temprano, y que anteriormente sus dueños no se habían visto en al necesidad de ocupar sus tierras como ahora; por lo que no descartan que en el futuro haya en verdad una intención de fraccionarlo para su ocupación habitacional.
