Tula de Allende. Ya han transcurridos dos meses desde que debieron pagarle las utilidades que por ley corresponde a los operadores y personal de la empresa Autotransportes Valle del Mezquital (AVM); suman miles los trabajadores del volante que están siendo afectados por este problema, solo les dicen que ya pronto les pagan y hasta la fecha siguen esperando; denunciaron además una serie de abusos de la que constantemente son objeto.
De acuerdo con declaraciones de los operadores de esta empresa de autotransporte de la que la diputada local por Tula Blanca Rosa Mejía Soto es socia capitalista, a estas fechas aun no les pagan las utilidades que por ley les corresponde recibir, y que debieron pagarles desde el pasado mes de mayo, tan solo en la empresa Urbanos y Sub Urbanos de Tula (UST) filial de AVM los afectados son alrededor de 3 mil trabajadores.
Los afectados que pidieron no revelar sus nombres por temor a represalias por parte de la empresa explicaron al El Independiente de Hidalgo la represión laboral de la que son objeto, “no nos podemos reunir más de tres compañeros porque piensan que estamos conspirando contra de ellos y luego luego nos llaman a personal y nos corren; así es como nos tiene controlados”.
Así mismo los denunciantes señalaron que cada año es lo mismo “si no les echamos en la radio o en la prensas no nos pagan, como los exhibimos solo así es como nos responden” los operadores dijeron que durante la campaña del priista Ramón Ramírez Valtierra le externaron este problema al ahora diputado federal electo quien se había comprometido en ayudarlos, por lo que a través de este medio nuevamente le mandan el mensaje para que los ayude.
Otra de las quejas de los empleados de esta empresa que constantemente es señalada por actividades monopólicas en la región es que la diputada local del PRI Blanca Rosa Mejía Soto sea una de las dueñas, y quien se supone debería ser defensora de los derechos de los trabajadores los mantenga sometido y sea quien fomente la violación de los derechos laborales de los trabajadores.
“si algún de los compañeros operadores los denuncia o incumplen con la cuenta de inmediato son bajados de sus unidades y meten en su lugar a otro; desgraciadamente somos tantos los que tenemos necesidad de trabajar que por eso aceptamos esas condiciones humillantes” dijo uno de los afectados; Cabe señalar que en medios locales son constantes los anuncios de AVM solicitando chóferes que bajo el argumento de que la empresa se encuentra en expansión requiere los servicios de mas personal, sin embargo queda en evidencia la falta de arraigo laboral por parte de los trabajadores, que son reemplazados con mucha facilidad por los propietarios de AVM.
De acuerdo con declaraciones de los operadores de esta empresa de autotransporte de la que la diputada local por Tula Blanca Rosa Mejía Soto es socia capitalista, a estas fechas aun no les pagan las utilidades que por ley les corresponde recibir, y que debieron pagarles desde el pasado mes de mayo, tan solo en la empresa Urbanos y Sub Urbanos de Tula (UST) filial de AVM los afectados son alrededor de 3 mil trabajadores.
Los afectados que pidieron no revelar sus nombres por temor a represalias por parte de la empresa explicaron al El Independiente de Hidalgo la represión laboral de la que son objeto, “no nos podemos reunir más de tres compañeros porque piensan que estamos conspirando contra de ellos y luego luego nos llaman a personal y nos corren; así es como nos tiene controlados”.
Así mismo los denunciantes señalaron que cada año es lo mismo “si no les echamos en la radio o en la prensas no nos pagan, como los exhibimos solo así es como nos responden” los operadores dijeron que durante la campaña del priista Ramón Ramírez Valtierra le externaron este problema al ahora diputado federal electo quien se había comprometido en ayudarlos, por lo que a través de este medio nuevamente le mandan el mensaje para que los ayude.
Otra de las quejas de los empleados de esta empresa que constantemente es señalada por actividades monopólicas en la región es que la diputada local del PRI Blanca Rosa Mejía Soto sea una de las dueñas, y quien se supone debería ser defensora de los derechos de los trabajadores los mantenga sometido y sea quien fomente la violación de los derechos laborales de los trabajadores.
“si algún de los compañeros operadores los denuncia o incumplen con la cuenta de inmediato son bajados de sus unidades y meten en su lugar a otro; desgraciadamente somos tantos los que tenemos necesidad de trabajar que por eso aceptamos esas condiciones humillantes” dijo uno de los afectados; Cabe señalar que en medios locales son constantes los anuncios de AVM solicitando chóferes que bajo el argumento de que la empresa se encuentra en expansión requiere los servicios de mas personal, sin embargo queda en evidencia la falta de arraigo laboral por parte de los trabajadores, que son reemplazados con mucha facilidad por los propietarios de AVM.
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