Tula de Allende.- Dirigente local del PAN Eduardo García Sánchez manda a sexagenaria al Cereso; la afectada de nombre Rosa Ortiz Pérez denunció que a base de engaños los agentes de la coordinación de investigaciones (antes policías ministeriales) de este municipio la sacaron de su domicilio para después con uso de la fuerza someterla y trasladarla al Centro de Readaptación Social donde permaneció por casi 17 horas, para después ponerla en libertad ante la intervención del abogado de la victima.
El pasado martes 25 de agosto la señora Rosa Ortiz Pérez de 62 años de edad, madre de la ex regidora Cristina Jiménez Pérez y suegra del presunto delegado municipal del Partido Acción Nacional Eduardo García Sánchez, fue detenida y trasladada al Centro de Readaptación Social de este municipio por agentes de la Coordinación de Investigaciones, lugar donde permaneció recluida por espacio de 17 horas.
La denunciante afirma que el matrimonio de panistas extorsionó a las autoridades para hacerle esto ya que dentro de poco habrá de celebrarse un juicio agrario en la ciudad de Pachuca donde se determinará el estatus legal de una propiedad que esta en disputa entre los involucrados y que al no acudir ella al juicio en automático lo perdería, por ello la acción desesperada de los ex asambleistas locales.
Ortiz Pérez expresó “El 9 de octubre tenemos audiencia en el tribunal agrario, en Pachuca, por eso siento que ellos están desesperados por evitar que yo acuda, sin no asisto puedo perder el juicio en su contra”; el problema legal entre estos personajes de la escena política local se remonta a años atrás, después de la muerte del padre de la ex regidora Cristina Jiménez, Juan Jiménez uno de los fundadores del PAN en el municipio, se dio una encarnizada lucha por la herencia del ex político finado.
Rosa Ortiz Pérez acudió la mañana de este martes a la presidencia municipal para buscar el apoyo de los actuales regidores del PAN, quienes abiertamente han desconocido el supuesto liderato de García Sánchez, quienes se deslindan de las actuaciones de su dirigente de partido en el municipio y quienes externaron buscarán una acercamiento con la dirigencia estatal para plantearles la problemática que se vive hacia el interior del PAN en el municipio y evitar que personas como el matrimonio García Jiménez se adueñen del partido y lo usen con fines personales que manchen el nombre de su instituto político.
El pasado martes 25 de agosto la señora Rosa Ortiz Pérez de 62 años de edad, madre de la ex regidora Cristina Jiménez Pérez y suegra del presunto delegado municipal del Partido Acción Nacional Eduardo García Sánchez, fue detenida y trasladada al Centro de Readaptación Social de este municipio por agentes de la Coordinación de Investigaciones, lugar donde permaneció recluida por espacio de 17 horas.
La denunciante afirma que el matrimonio de panistas extorsionó a las autoridades para hacerle esto ya que dentro de poco habrá de celebrarse un juicio agrario en la ciudad de Pachuca donde se determinará el estatus legal de una propiedad que esta en disputa entre los involucrados y que al no acudir ella al juicio en automático lo perdería, por ello la acción desesperada de los ex asambleistas locales.
Ortiz Pérez expresó “El 9 de octubre tenemos audiencia en el tribunal agrario, en Pachuca, por eso siento que ellos están desesperados por evitar que yo acuda, sin no asisto puedo perder el juicio en su contra”; el problema legal entre estos personajes de la escena política local se remonta a años atrás, después de la muerte del padre de la ex regidora Cristina Jiménez, Juan Jiménez uno de los fundadores del PAN en el municipio, se dio una encarnizada lucha por la herencia del ex político finado.
Rosa Ortiz Pérez acudió la mañana de este martes a la presidencia municipal para buscar el apoyo de los actuales regidores del PAN, quienes abiertamente han desconocido el supuesto liderato de García Sánchez, quienes se deslindan de las actuaciones de su dirigente de partido en el municipio y quienes externaron buscarán una acercamiento con la dirigencia estatal para plantearles la problemática que se vive hacia el interior del PAN en el municipio y evitar que personas como el matrimonio García Jiménez se adueñen del partido y lo usen con fines personales que manchen el nombre de su instituto político.
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